[vc_row css_animation=»» row_type=»row» use_row_as_full_screen_section=»no» type=»full_width» angled_section=»no» text_align=»left» background_image_as_pattern=»without_pattern»][vc_column][vc_column_text]La historia de las Aceitunas de mesas es un hecho. Es indudable. Es un alimento pequeño, pero con gran trayectoria en la gastronomía del Mediterráneo. Su recorrido en la mesa de la cuenca mediterránea es milenario. Son muchas las costumbres que se reúnen en torno a estas diminutas delicias. El consumo de las Aceitunas de mesas es variado tanto en preparación como en toma, pero el acierto siempre es seguro.
El olivo tiene su origen en la Era Terciaria, ya en la Grecia Micénica (siglos XVIII a XII a.C). Hay anotaciones que recogen la existencia de este árbol. Su cultivo se extendió por Europa, África y Asia Menor. Es en el siglo XVI cuando llegan a América junto con los colonizadores españoles. En cuanto a su mapa etimológico, existen diversas hipótesis al respecto. El término Olivo proviene de la palabra cretense Elaiwa y de la griega Elaia. De las cuales, resultó más tarde el vocablo Oleum, derivando del mismo Oli, perteneciente a las lenguas romance. Asimismo, el término hebreo Zait transmutó en árabe a Zaitum. Llega al castellano como Az-zait, cuyo significado es “jugo de oliva”. Finalmente deriva en lo que hoy conocemos como Aceite.
En un primer momento, las Aceitunas de mesas era válida solo por su aceite. No se destinaba a su consumo propiamente. No obstante, existen datos que verifican su consumo hacia el siglo I. Los conocidos escritos del célebre gaditano Columela, engloban varias técnicas de elaboración de aceitunas de mesa, desde aliños con hinojo hasta preparaciones con hojas de lentisco. Una genialidad de la cocina de por aquel entonces.
Las Aceitunas de mesas son un alimento relevante tanto en la dieta como en la historia del Mediterráneo. Durante los siglos XIX y XX eran el sustento esencial de los jornaleros andaluces y extremeños. La elaboración “industrial” española llegó primeramente a Andalucía. A finales del siglo XIX Sevilla se convertía en la aventajada productora de aceitunas de mesa “verdes al estilo español” o “sevillano”. Resulta evidente que España se posicione actualmente como líder en el mercado mundial, tanto a nivel de producción como de comercialización.
¿Cuál es la historia de Aceitunas Escamilla?
En 1950 comenzaría la historia de Aceitunas Escamilla de la mano de Juan Antonio Escamilla García, que formó los cimientos de la empresa. Tras más de 60 años de experiencia, y con la 3ª generación incorporada al negocio, las olivas de Umbrete conquistan el mundo, y llegan a muchos rincones donde son un reclamo gastronómico.
Nuestro trabajo diario, realizado con esmero y orgullo, es la producción, aderezo, envasado y cuidar la calidad y calidad de estas pequeñas joyas de nuestra tierra con mucha historia que contar…[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]